lunes, 11 de mayo de 2015

En el oído sería mejor.

Quizá escribir hacia una mujer me resulta más versátil porque mi musa soy yo misma. Y no de esa forma narcisista-loca, sino que plasmo todo aquello que me gustaría escuchar. He idealizado tanto el amor que fantaseo con versos que me recitan en el oído. Espero que congeniemos, gracias.






Y ella se colocaba ese vestido de flores.
Sabía que yo daría lo que fuera por echar raíces en ella.

Y ella se colocaba de espaldas en la cama,
inquieta e ignota.
Y ella esperaba qué yo la derritiera.


Y ella coreaba el placer insaciable que yo le producía.
Y ella me recitaba halagos y mesías.
Y ella se colocaba el vestido...

En el que yo ya había echado raíces.

Rosa, prometida:
Te voy a confesar una pequeña cosa: no hay mujer más lúgubre que tú.
Rosa, no puedo ser más directo, quiero tenerla de nuevo entre mi cuerpo, entre mi alma, mi dermis; qué sus costillas encajen en las mías, qué sus  piernas vibren y sus labios se pongan rojos, sí quiere te vuelvo a besar los cuatro, los seis.
Rosa, te lo prometo.
Rosa, te deseo.
Rosa, yo sé que usted también lo hace.
Vuelva y cantemos la opera de nuestras vidas
Esta cama la extraña, que la extraña.
Mucho, mucho, la extraña.




Dolores

Me llamo Dolores
 Dolores que fui
 Dolores que soy
Y no sé si lo que seré generará dolores.

Miles de penas recorren este cuerpo
Cuerpo ingrato, cuerpo que ya no siente
Cuerpo que ya no es saciado de amor, sino de dolores.

¿Será que me puedo desgarrar los dolores?
Ya no siento euforia
Ya no siento manos en la cara que me digan:
Que los dolores no valen la vida

Soy tan fuerte como mis dolores
Dolores que agobian
Dolores que vienen y que yo quisiera que se fueran
Pero no, tengo dolores en los dolores

Dolores que un amor ingrato me ha dejado
Pero si los dolores los tenía ese amor
¿Por qué me los dejo?
Ahora cargo con los dolores del amor
¡Ingrato!

Mis dolores son tan fuertes que le gritan a la luna que no llene
Le gritan al cielo azul que se nuble
Le gritan a las hojas que caigan
La única que debe de caer soy yo por el peso de los dolores

Dolores de la madre
Dolores del amor
Dolores que soy
Dolores que seré


"Soy la última página de la libreta: llena de ideas, de errores, de amores, de corazones; la libreta siempre está vacía, no hay pasado."

¡Pues mira! más qué necesidad

Yo deseo decirte qué te quiero

qué te adoro

qué no me dejes

qué siempre

qué por favor

qué quiéreme

qué ven






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